El asma es una enfermedad crónica de los pulmones. Esta enfermedad crónica provoca el estrechamiento y la inflamación de las vías respiratorias, lo que puede dificultar la respiración.
Tipos de asma
Uno de los primeros pasos para controlar el asma es identificar el tipo de asma que tienes. Hay muchos tipos de asma:
- Asma alérgica: esta forma de asma puede desencadenarse por la caspa de las mascotas, el polvo, el polen, etc.
- Asma no alérgica: el asma no alérgica puede estar provocada por el estrés, enfermedades, factores ambientales o incluso algunos medicamentos.
- Broncoconstricción inducida por el ejercicio: ¿alguna vez has sentido que te falta el aire cuando haces ejercicio? Es posible que tengas broncoconstricción inducida por el ejercicio.
- Asma ocupacional: en ocasiones, los desencadenantes ambientales que existen en el trabajo, como los productos químicos, etc., pueden provocar asma ocupacional.
- Para obtener más información sobre otros tipos de asma, puedes visitar el sitio web de la American Lung Association (Asociación Americana del Pulmón).
Síntomas comunes del asma
Los síntomas del asma pueden ser de leves a graves. Los siguientes síntomas pueden indicar que tienes asma:
- Falta de aire
- Tos (especialmente por la noche, durante el ejercicio o al reír)
- Dificultad para respirar
- Opresión en el pecho
- Sibilancias
- Estrés
Si sospechas que los síntomas que tienes son asma, debes consultar a tu profesional de atención médica. No dejes que el asma te frene.